• La exposición recoge momentos de la vida de Jonan, un niño con síndrome de Down y de West afectado también por problemas de visión
  • Está formada por una quincena de fotografías en blanco y negro y en color, realizadas por Javier Inchusta, padre de Jonan
  • Podrá visitarse hasta el 2 de junio de 2018 en la Sala Cambio de Sentido de Fundación ONCE

La sala Cambio de Sentido de Fundación ONCE acoge desde este miércoles hasta el próximo 2 de junio ‘Brazadas de superación’, una muestra fotográfica en la que su autor, el navarro Javier Inchusta, refleja el coraje y la ternura de su hijo Jonan, un niño con síndrome de Down y de West afectado además por la pérdida de visión en los dos ojos que lucha cada día por conseguir nuevos retos.

La exposición, formada por una quincena de fotografías en blanco y negro y en color, se inaugura en el día de hoy, coincidiendo con el Día Mundial del Síndrome de Down.

‘Brazadas de superación’ es un conjunto de fotografías que reflejan el empeño de Javier e Izaskun Adot, su mujer, por sacar lo mejor de Jonan a través de la natación y que ponen también de manifiesto cómo esta actividad es un estímulo para el niño, que derrocha ternura en cada imagen.

Así, Javier Inchusta, desde su estudio IRfotografía,  ha ido recogiendo instantes cotidianos de su hijo Jonan en familia que ahora se han recopilado en ‘Brazadas de superación’, un conjunto de imágenes que desprenden arte, fuerza y cariño, según pone de manifiesto la comisaria de la muestra, Isabel Bettina.

La exposición transmite “la fuerza interior, la fuerza que nos acompaña siempre cuando queremos mostrar lo que somos, cuando queremos comunicarnos con el exterior y decir a los demás, aquí estamos, aunque haya otras capacidades para expresarlo”, afirma Bettina.

Pero ‘Brazadas de superación’ es más que un conjunto de fotografías: es también el nombre de la fundación creada en 2016 por Javier Inchusta, Izaskun Adot y otros padres empeñados en demostrar que el esfuerzo suele tener recompensa y que, por eso, con discapacidad o sin ella, hay que proponerse siempre nuevos retos.

“Nuestra fundación pretende mostrar la satisfacción del esfuerzo, la cara amable de la discapacidad y un aprendizaje de vida”, afirman sus impulsores, que aseguran también que “afrontando el día a día con ilusión y ganas de trabajar”, los jóvenes mejoran su autonomía y desarrollo, haciendo aquellas actividades que más les satisfacen.

 

 

No hay comentarios

Dejar respuesta